EEUU «cierra» su frontera y enviará de vuelta a venezolanos que crucen. ¡Ojo cubanos! (video)

Estados Unidos y México llegaron a un acuerdo que permitirá a las autoridades estadounidenses enviar de regreso a algunos migrantes venezolanos a través de la frontera, una especie de «cierre» de su frontera para la inmigración ilegal proveniente de Venezuela.

Al mismo tiempo, EEUU amplía las oportunidades para que otros soliciten la entrada legal a través de los consulados de Estados Unidos en el extranjero, dijeron funcionarios el miércoles, según informa The Washington Post.

El arreglo sigue el modelo del programa de la administración Biden que ha permitido que casi 70.000 ucranianos ingresen a los Estados Unidos durante el último año con un estatus legal conocido como libertad condicional humanitaria.

Los solicitantes deben tener una persona u organización dispuesta a patrocinarlos financieramente y presentarse en los consulados estadounidenses en el extranjero, no en la frontera entre Estados Unidos y México.

Los venezolanos aprobados para el programa podrán volar a los Estados Unidos y buscar una aprobación más rápida para la autorización de trabajo, en lugar de intentar un peligroso viaje por tierra.

“Las acciones que Estados Unidos y México están anunciando hoy tienen como objetivo abordar la migración irregular más aguda y ayudar a aliviar la presión sobre las ciudades y estados que reciben a estas personas”, dijo el Departamento de Seguridad Nacional en un comunicado.

“Con vigencia inmediata, los venezolanos que ingresen a Estados Unidos entre puertos de entrada, sin autorización, serán devueltos a México”, dijo el comunicado.

“Al mismo tiempo, Estados Unidos y México están reforzando sus operaciones coercitivas coordinadas para atacar a las organizaciones de tráfico de personas y llevarlas ante la justicia”.

El gobierno mexicano dijo que Estados Unidos acordó permitir que 24.000 venezolanos lleguen a Estados Unidos por vía aérea según los términos del acuerdo.

México, en un esfuerzo por disuadir a los venezolanos de dirigirse directamente a la frontera, aceptará a los migrantes venezolanos bajo el Título 42, una medida pandémica aparentemente diseñada para proteger la salud pública.

México permitirá que los venezolanos que se encuentran actualmente en México soliciten la entrada a los Estados Unidos bajo el nuevo programa humanitario. Pero los venezolanos recién llegados a México serán detenidos por la autoridad migratoria del país y posiblemente deportados, dijeron las autoridades.

Ha sido difícil deportar venezolanos de Estados Unidos o México porque el gobierno venezolano se ha negado con frecuencia a permitir vuelos de deportación al país. México ha aceptado a regañadientes las demandas de EEUU sobre el Título 42 desde que se implementó la política en 2020. Pero anteriormente no aceptaba a los venezolanos en gran parte debido a los desafíos de deportación.

Las autoridades mexicanas dicen que el programa funcionará solo si Estados Unidos acepta aceptar un número significativo de venezolanos bajo el nuevo programa de visas, para que los migrantes crean que tienen una alternativa viable para transitar por Centroamérica.

“Estaremos atentos al programa para asegurarnos de que los números sean suficientes”, dijo un funcionario mexicano que habló bajo condición de anonimato para discutir el acuerdo.

El Departamento de Seguridad Nacional anunció el miércoles un aumento en la asignación de visas de trabajo, agregando 65,000 visas H2-B para trabajadores temporales no agrícolas. De esas, 20,000 visas se reservarán para personas de América Central y Haití, según el departamento.

Con un número récord de inmigrantes venezolanos que ingresaron a Estados Unidos a través de la frontera sur en los últimos meses, los funcionarios de Biden se han estado esforzando para evitar una emergencia humanitaria y logística creada por la afluencia.

La mayoría de los migrantes enviados en autobuses por los gobernadores republicanos de Arizona y Texas a ciudades del norte de Estados Unidos son venezolanos. El alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, dijo que el sistema de refugios de su ciudad se ha visto abrumado por su número, declarando una crisis.

Funcionarios de la administración familiarizados con el plan dijeron que el acuerdo ha estado supeditado a que México acepte aceptar más migrantes expulsados por las autoridades estadounidenses utilizando el Título 42.

México ha limitado la cantidad de migrantes que recibe, citando sus límites de capacidad de alojamiento, y ha permitido que EE. UU. devuelva a relativamente pocos venezolanos.

Aproximadamente 1.000 venezolanos han estado cruzando la frontera sur de EEUU por día en las últimas semanas, según los últimos datos disponibles de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EEUU.

Un funcionario familiarizado con el programa expresó su escepticismo de que el programa de EEUU tenga éxito si México solo acepta el regreso de unos pocos cientos de migrantes por día en la frontera.

Las autoridades de EEUU prácticamente no tienen la capacidad de enviar a los venezolanos de regreso a su país de origen en vuelos de deportación, porque EE. UU. no reconoce al líder venezolano, Nicolás Maduro, como el presidente legítimo del país.

Los venezolanos que no son “expulsados” a México bajo el Título 42 seguirán pudiendo ingresar a Estados Unidos, y si el nuevo programa genera retrasos y largas colas en los consulados de Estados Unidos en el extranjero, es posible que algunos de esos solicitantes no estén dispuestos a esperar.

Casi 7 millones de venezolanos han dejado su tierra natal desde 2013, según las últimas estimaciones de Naciones Unidas. Muchos se establecieron en Colombia, Perú y otras naciones sudamericanas, pero han optado por hacer el viaje al norte de los Estados Unidos en busca de una mejor seguridad y oportunidad económica.

La administración de Biden intentó poner fin a la política de salud pública del Título 42, pero fue bloqueada en un tribunal federal en mayo.

Los críticos dijeron que el acuerdo con México parecía ser otra indicación de la dependencia de la administración del Título 42.

“No se nos han presentado los contornos del Programa de Parole Humanitario para venezolanos, pero estamos extremadamente preocupados por la aparente aceptación, codificación y expansión del uso del Título 42, una orden de salud irrelevante, como piedra angular de la política fronteriza. Uno que elimine el derecho legal al asilo”, dijo Thomas Cartwright, un defensor de inmigrantes del grupo Witness at the Border.